Poder ciudadano

 PODER CIUDADANO.

Ante la arremetida que la dictadura está teniendo

con las detenciones y secuestros de nuestros compañeros de Vente Venezuela, es hora de apelar a los principios de dignidad y ciudadanía, hoy mas que nunca esta en juego la libertad de nuestra nación, hoy la valentía, la voluntad y la solidaridad deben ser nuestra  actitud para la lucha que nos toca librar, el miedo y la inacción son hermanos gemelos que deben ser manejados y neutralizados en este momento aciago, para así dar paso a la defensa de nuestros derechos constitucionales, la organización y  la fuerza ciudadana tienen que iniciar una respuesta cívica, pero enérgica a esta inquisición que se viene aplicando.

No más aprehensiones, es hora de la resistencia frontal de quienes creemos en los derechos universales que nos asisten, queda prohibido caer en la victimización y en la desesperanza, es imprescindible responder sin vacilaciones a las agresiones y protegernos los unos a los otros, ellos podrán tener las fuerzas de las armas, pero nosotros tenemos la fuerza de la razón, la fuerza del amor y la fuerza de la justicia espiritual. 

Víctor Fran, sobreviviente del holocausto en los campos de concentración de Auschwitz, nos advertía que uno de los errores que jamás debe repetir la humanidad, es lo que el considero el octavo pecado capital, la inacción y la pasividad, ante los atropellos y abusos por parte de cualquier agresor, venga de donde venga.

Tenemos que actuar con honor y vehemencia, empezar a ejercer el poder ciudadano para defender con determinación y gallardía a nuestros compañeros activistas de los atropellos y detenciones arbitrarias, no debemos permitir se que realicen genuinamente actos transgresores sin ningún tipo de respuesta por parte de la gente de bien. Cuando en las calles y espació de cada rincón de Venezuela, las organizaciones civilistas defiendan y reaccionen de forma enérgica a los que atropellan a nuestros defensores de la libertad, el régimen empezar a entender que el pueblo no es indiferente y ese será un momento aleccionador que dará vigencia al magnánimo poder ciudadano.

abrazo cordial

Rafael Silva